Puerto Valparaíso realiza positivo balance tras regreso de los cruceros

Entre diciembre y abril hubo ocho recaladas que implicaron el movimiento de más de 5.800 personas entre pasajeros y tripulantes, tras una temporada en que no hubo arribo de este tipo de naves.

Sábado 2 de abril de 2022

Un positivo balance tuvo el cierre de la temporada de cruceros 2021-2022 en la ciudad de Valparaíso, actividad turística que se mantuvo en pausa durante 22 meses producto de las restricciones asociadas a la pandemia, pero que se reactivó en diciembre con el arribo de la primera nave: el Viking Jupiter, con capacidad para más de mil pasajeros entre turistas y tripulantes; y que culminó este fin de semana con la recalada del crucero Roald Amundsen en TPS.

Entre diciembre y abril se registraron un total de ocho recaladas de naves, entre las que estaban el Viking Jupiter, el Silver Whisper, Silver Moon, Viking Star y el Roald Amundsen. Este último crucero será el último en zarpar de las costas porteñas este domingo 4 de abril a las 20 horas para dirigirse hacia Ecuador.

“Es muy positivo que hayamos podido retomar las recaladas de cruceros en Valparaíso, considerando su relevancia para la economía de la ciudad y, especialmente, para todas las actividades que viven del turismo, como hotelería, gastronomía y pequeño comercio, entre otros. Si bien la temporada fue más baja que las anteriores, sin lugar a dudas es un paso importante en el camino de la reactivación tras los efectos de la pandemia, y marca un precedente para el reinicio del turismo de cruceros”, afirmó el gerente general de Empresa Portuaria Valparaíso (EPV), Franco Gandolfo.

El alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, manifestó que “estamos felices porque hemos vuelto a activar el turismo de cruceros en nuestra ciudad. Esta ha sido una temporada que nos ha permitido mostrar que somos un destino confiable para esta industria, pues no solo se han cumplido los estándares sanitarios y de coordinación institucional para recibir a quienes embarcan y desembarcan de las naves, sino que se han cumplido los compromisos en materia de recaladas, e incluso se ha podido acoger en Valparaíso a naves que han tenido que modificar su itinerario por cuestiones climáticas. Ahora debemos trabajar para que la próxima temporada podamos recuperar las dinámicas que teníamos antes de la pandemia”.

“A pesar de toda la incertidumbre de la pandemia, logramos asegurar un buen número de recaladas de naves de pasajeros en Valparaíso y especialmente cruceros nuevos, que nunca antes habían venido a Valparaíso y que fueron construidos en los últimos dos o tres años. Esto es una señal de que la industria del turismo de cruceros confía en que podemos brindar las condiciones necesarias no sólo en cuanto a los servicios, sino en relación con las medidas de seguridad para prevenir el contagio del Covid, así que estamos satisfechos y ya trabajando en lo que será la próxima temporada”, comentó Oliver Weinreich, gerente general de Terminal Pacífico Sur Valparaíso (TPS).

Francisco Godoy, gerente general de la Corporación Regional de Turismo de Valparaíso destacó que “estamos muy contentos de haber reactivado la temporada de cruceros en la región. Después de un trabajo mancomunado entre el municipio, la Empresa Portuaria y los terminales de Valparaíso, así como las navieras, autoridades sanitarias, empresarios del turismo y Sernatur, establecimos protocolos para ayudar a los turistas y ahora ya estamos trabajando en conjunto para potenciar lo que será la temporada 2022-2023”

Cabe destacar, que los protocolos sanitarios, producto de la pandemia, establecieron que todos quienes desembarcaron, debieron cumplir con una serie de estrictos controles de bioseguridad instruidos por la Seremi de Salud, a lo que se sumó resguardos propios de las empresas de cruceros, tales como controles diarios de PCR a los pasajeros para evitar posibles contagios y implementación de camarotes especialmente habilitados para aislamiento en caso de contagio, entre otras medidas.

Todas las acciones implementadas por Valparaíso resultaron de la coordinación entre las autoridades sanitarias, marítimas, los terminales y el terminal de cruceros administrado por EPV, lo que permitió que la temporada se desarrollara sin mayores contratiempos que pudieran afectar al resto de las actividades turísticas y comerciales de la ciudad.